Antes de que empieces a arder, enfríate.

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En ocasiones las cosas salen mal, cosa que ya sabemos y a todos nos han ocurrido porque de hecho, se nos paga para solucionar problemas y si todo fuese perfecto, estaríamos en el paro. Es posible que el problema sea tan grave que sientas que la sangre hierve en tus venas. El calor invade tu cuerpo y tienes ganas de gritarle a las personas que se han equivocado. Necesitas sacar esa adrenalina, ese incremento del pulso de alguna manera.

No soy partidario en ningún caso de que en estas situaciones nos dediquemos a intentar solucionar el problema en caliente. Dejemos que se enfríe el asunto. Las posibles soluciones acudirán con mayor facilidad a nuestra mente. Una mente "perturbada" por la rabia no suele ser creativa nada más que con soluciones radicales.

En estas ocasiones depende del tiempo que tengas disponible. Si tienes la posibilidad de demorar el asunto hasta el día siguiente en mi caso es lo que hago siempre que tengo la oportunidad. Después de ocho horas de sueño las cosas se ven de otro color y las soluciones a los problemas afloran por si mismas en periodos en los que el cerebro está descansando como es la noche. Durante el periodo que ocurre entre el problema y la búsqueda de solución, no te quedes parado: busca datos acerca del problema y plantea posibles soluciones, pero no tomes decisiones hasta el momento adecuado.

Si no tienes tiempo de dejarlo para el día siguiente, entonces se trata de liberar tanta tensión como sea posible. Las actividades físicas en este caso son la estrella. Haz una carrera, una clase de spinning o simplemente sal a pasear. El cambio en la actitud física produce un cambio en la actitud mental.

Cuando no dispongas de tiempo ni siquiera para esto, entonces tendrás que recurrir a tus colaboradores por este orden y según disponibilidad y afinidad: jefes, compañeros de departamento y resto de compañeros. Habla con alguien y cuéntale tu problema, a veces simplemente que alguien nos escuche es suficiente para reducir la presión en el sistema.

Si no dispones de tiempo ni siquiera para hablar con nadie, seguro que puedes hacer algunos ejercicios de respiración que puedes encontrar en YouTube y actualmente los smartwatch como el Fitit Ionic y el Apple Watch incorporan aplicaciones por defecto para ayudarte a relajarte. Por música tranquila que te ayude a dejar salir el estrés y cierra los ojos mientras hace su efecto.

Ante todo, no tomes decisiones ni tengas reuniones con el ánimo alterado.

Relájate.

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